Pienso que es superior a mis fuerzas. Odio esa parte de mi que no quiere adaptarse, que quiero hacer lo que le apetece,sin más,esa parte de mi cabeza que se cree que no hay consecuencias…Pero si las hay. Y lo cierto es que no estamos solos en el mundo como para hacer lo que nos salga cuando queramos. Influimos en los demás, hacemos daño. Porque el punto medio es el saber cuando puedes volverte loca y cuando tienes que mantener la compostura. Eso es vivir. No puedes ser una bala perdida toda tu vida, aunque puede que estubiera bien. Pero ¿y los demas?. Acabarías sola, sola y sola. O almeno harías daño a personas que realmente te quieren, que les importas. No sé, le doy vueltas. Busco soluciones. Entro en dilemas. ¿Hasta que punto puede querer a alguien?¿Hasta el punto de cambiar por esa persona?¿hasta el punto de no hacer lo que quieres y sí lo que debes?Bueno. Si merece la pena lo haces y punto. A lo mejor es porque solo he conocido a otra persona como ella, y no creo que haya mas de dos en el mundo, por eso, no voy a perderla.