miércoles, 14 de diciembre de 2011
Yo creo que enamorarse de alguien ocurre poco a poco. Tan poco a poco que casi que ni te das cuenta. Pero llega un momento; quizás una discursión, una frase, un pequeño detalle, una separación, un tiempo, unas vacaciones...Y va y te das cuenta de que estas hasta las trancas. Por que sí, surge poco a poco pero te das cuenta de golpe. Piensas "mierda no sé como ha pasado". Y en ese momento ya no puedes hacer nada, porque ya es tarde, porque si creias que tu solo estabas en la acera del tráfico de la vida ahora ya estas en el medio, ya te han pasado por encima y no lo has visto venir. Has asumido los daños. Pero bueno, si lo piensas detenidamente, ¿Que más da las veces en las que tropieces con la misma piedra mientras te guste esa piedra? y sobretodo mientras le tengas a él para amortiguar el golpe.
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